Receta tradicional, sencilla, deliciosa y contrastada. Vamos, infalible, en la que la calidad de la materia prima, las almejas, resulta fundamental.
Por Capitán Rábano.
Ya está aquí, ya llegó, un mes más el #asaltablogs y en esta ocasión por partida doble, ya que es el asalto final de la temporada y hemos tenido a dos ganadoras. En esta entrada, he asaltado la despensa de Belén, la capitana de "El toque de Belén", a la que se le da muy bien esto de ganar el reto, pues ya lo consiguió el año pasado.
Ya os he hablado de ella y publiqué esta entrevista que tuvo a bien concederme, por lo que no me extenderé mucho más, salvo para recordar que ella es una avilesina de pro y por ello he querido aprovechar esta oportunidad para hacer un homenaje a la gastronomía de su tierra, que también es la de mis abuelos paternos. Y oye, que me ha quedado de escándalo estas almejas a la sidra asturiana.
La receta es sencilla, rápida y deliciosa. Barata no, al menos si utilizas almejas de calidad a precios de mercado y en este caso la materia prima importa mucho. No me voy a enrollar, que no tengo el día locuaz.
Ingredientes:
500 g. de almejas.
2 dientes de ajo.
1/2 cebolla.
Sidra asturiana.
Guindilla.
Aceite de oliva virgen extra.
1 Cucharadita de harina.
1 Cucharada sopera de salsa de tomate.
1 Cuchara de pimentón dulce.
Perejil fresco.
Elaboración:
1.- Previamente preparamos las almejas sumergiéndolas en agua fría con sal durante dos horas. Transcurrido el tiempo retiramos el líquido y disponemos las almejas para la receta.
2.- En una cazuela a fuego fuerte echamos un buen chorro de sidra y a continuación las almejas. Tapamos y dejamos transcurrir un par de minutos, tras los cuales retiramos y reservamos las almejas abiertas, las cerradas las tiramos. Colamos y reservamos también el líquido sobrante.
3.- En una cazuela (sirve la anterior), disponemos un poco de aceite y pochamos la cebolla cortada en brunoise muy fina, cuando esté casi lista añadimos el ajo picado también muy fino y las guindillas enteras, que van siempre mejor de dos en dos y se echan enteras para poder retirarlas fácilmente antes de emplatar.
4.- Cuando el ajo esté cocinado, incorporamos el pimentón, la harina (removemos bien y rápido con una espátula de madera) y el tomate. Dejamos que cocine un poco antes de añadir medio vaso de sidra y el líquido en el que abrieron las almejas.
5.- Comprobamos el punto de sal y el espesor de la salsa (podéis echar más sidra si está muy espeso) y añadimos las almejas. Cocinamos todo junto un par de minutos y apartamos del fuego. Dejamos reposar 5 minutos y antes de servir picamos perejil fresco por encima (también es un momento ideal para inundarlo de ese cilantro que odia tu cuñado el día que le has invitado a comer a casa y te haces el olvidadizo).
Se que están muy ricas, porque se las asalté anteriormente y nos encantaron!!Bs.
ResponderEliminarHola Cesar !! me encanta que hayas escogido esta receta y además una receta que llevara sidra asturiana, que sabes que me encanta.
ResponderEliminarEs verdad barata no es, pero merece la pena hacerla con unas buenas almejas.
Por cierto nos veremos o por Madrid o por Avilés, para tomar una sidra.
Despues vuelvo a leer la entrevista no me acuerdo jajajja.
Mil gracias por el esfuerzo de este mes.
Besinos
El toque de Belén
Madre mía esas fotos lo dicen todo!!! poco se puede añadir.
ResponderEliminarBesitos itos
madre mía!! de ese plato daría buena cuenta yo...dejame preparar una hogaza de pan y me pongo a ello...que ricooo
ResponderEliminarQué buena pinta... vengo con una barra de pan para no dejar ni una gota de esa salsita...
ResponderEliminarY aunque no sean baratas, la pinta que tienen esas almejas lo dice todo. ¡En alimentación si se puede, hay que apostar por la calidad! Luego merece la pena.
Un abrazo, Cesar!